Ignacio Barrales, actor, director, dramaturgo y docente, ha encontrado en la juglaría una poderosa herramienta de resistencia escénica. Su reciente seminario titulado Juglaría y Risastencia: saberes del trabajo escénico juglaresco, presentado en la Universidad UNIACC, se enfocó en la vigencia de este arte milenario, revelando cómo los juglares no solo entretenían en la Edad Media, sino que también desafiaban las estructuras de poder, un aspecto que sigue siendo relevante en la escena contemporánea.
Este seminario formó parte de la retribución asociada a la beca Chile Crea 2022, otorgada por el Fondo Nacional de Fomento y Desarrollo de las Artes Escénicas. En él, Ignacio compartió los resultados de su investigación, en la que profundiza en el trabajo del actor y bufón chileno Andrés del Bosque, considerado un exponente de la temática.
Juglaría: de la Edad Media a la actualidad
Los juglares, quienes en su época eran excluidos tanto por la iglesia como por el sistema feudal, desarrollaron un arte que mezclaba el humor, la música y el teatro, al tiempo que criticaban las estructuras de poder.
Durante el seminario, Ignacio expuso cómo estos artistas, a menudo vistos como figuras bufonescas, jugaban un papel crucial en la resistencia cultural y social de su tiempo.
Uno de los principales focos del seminario fue el trabajo de Andrés del Bosque, un multifacético actor y dramaturgo que ha seguido el legado juglaresco en sus creaciones. En su obra El Día del Juicio (2000), Del Bosque utilizó los recursos propios de la juglaría para desafiar las normas sociales de su época, un enfoque que Barrales ha investigado a profundidad como parte de su tesis de Magíster en Teoría e Historia del Arte de la Universidad de Chile.
El seminario no solo fue un espacio de reflexión teórica, sino también una experiencia práctica que permitió a los asistentes participar activamente en la exploración de los conceptos juglarescos.
Entre los estudiantes de teatro que asistieron, se destacó el interés por comprender la juglaría más allá de su imagen tradicional. A lo largo del seminario, los participantes establecieron paralelismos entre las antiguas prácticas juglarescas y las manifestaciones artísticas que hoy se pueden observar en espacios públicos, donde el humor y la crítica social siguen presentes.
Una de las principales conclusiones de Ignacio Barrales es que el juglar no solo es un artista que provoca risa, sino que también es un vehículo de resistencia. Durante el seminario, explicó que los juglares, al enfrentar el poder con sus actuaciones, hacen visible un saber popular que sigue siendo relevante en la actualidad. Este saber, lejos de ser una identidad pura o inalterable, se construye a partir de las experiencias y tensiones que surgen entre lo marginal y lo dominante.
La investigación del dramaturgo se ha centrado en entender cómo los recursos juglarescos continúan siendo efectivos hoy en día y qué es lo que resisten. Su hipótesis plantea que los juglares no solo persisten como figuras culturales, sino que también revelan una estrategia de resistencia que sigue siendo pertinente en una sociedad que continúa excluyendo voces marginales.
Futuras proyecciones
Aunque por ahora Ignacio Barrales está centrado en la finalización de su tesis, su intención es llevar este seminario a otros espacios académicos. La juglaría, como forma de arte crítica y popular, tiene un gran potencial para ser explorada en distintos contextos, y planea seguir profundizando en sus estudios sobre el trabajo de Andrés del Bosque.
El seminario Juglería y Risastencia dejó una profunda impresión en los asistentes, tanto por su enfoque innovador como por su aplicación práctica. Este proyecto se enmarca en una investigación más amplia que busca no solo rescatar el legado juglaresco, sino también demostrar su relevancia en el teatro y la sociedad actuales.