Daniel Isler, egresado de la Escuela de Teatro y Comunicación Escénica, ha llevado su talento artístico más allá de los escenarios para adentrarse en el intrigante mundo de la ciberseguridad.
Actualmente, ejerce como docente de actuación e improvisación, en UNIACC, y lidera la Unidad de Ingeniería Social en DreamLab Technologies, una empresa suiza con presencia global en Alemania, España, Argentina, Perú, Bolivia, Colombia, Omán, Malasia, Nueva Zelanda y Chile, que se especializa en ofrecer soluciones de protección para el espacio físico cibernético.
Esta compañía ha redefido la seguridad con enfoques basados en inteligencia e interfaces humanas que abarcan la vista, el habla, los gestos y el tacto, en contraposición a los métodos tradicionales de teclado y ratón.
La empresa se dedica a asesorar a individuos, organizaciones y autoridades, integrando estrategias y gobernabilidad en ciberseguridad en sus procesos de gestión. Sus servicios incluyen auditorías, consultoría en ciberseguridad, pruebas de penetración, monitoreo, seguimiento y fortalecimiento de sistemas.
La vida de un egresado UNIACC: De las tablas al mundo de la ciberseguridad
Daniel Isler inició su carrera artística en espacios no convencionales antes de unirse a DreamLab Technologies en 2015.
Su entrada al mundo de la ciberseguridad fue tan única como su enfoque en el teatro. Le pidieron infiltrarse en una empresa para demostrar su vulnerabilidad, una tarea que parecía más propia de una trama de espionaje que de la vida real. Sin embargo, con su ingenio y su anhelo constante de ir más allá, Daniel aceptó el desafío.
Hoy, como líder de una unidad interdisciplinaria en DreamLab Technologies, Daniel coordina a actores, publicistas, ingenieros informáticos, sociólogos y psicólogos, fusionando las artes escénicas con la ciberseguridad.
Él enfatiza la importancia de la ingeniería social, señalando que muchos ciberataques comienzan con errores u omisiones humanas, y destaca cómo la interpretación de gestos y la lectura de la comunicación no verbal son esenciales en este campo.
Daniel, que siempre soñó con ser un agente infiltrado, anima a los estudiantes a explorar más allá de las fronteras convencionales.
Recuerda su tiempo en UNIACC como una experiencia enriquecedora, participando en festivales de teatro y buscando aprender de diversas disciplinas. «Hagamos lo que para otros parece imposible», con estas palabras invita a los estudiantes, mostrando que los sueños pueden materializarse más allá de los escenarios tradicionales.
